La semana pasada (Previo a mi enfermedad) vino a tocar la puerta de mi casa un guardia de seguridad que estaba muy preocupado porque un desadaptado social tiro una colilla de cigarro en un solar baldío que hay frente a mi casa, y por su puesto, no tardó en hacer efecto. Dos minutos después las llamas estaban a una altura de casi dos metros.
La verdad no me preocupaba tanto que el solar agarrar fuego, lo que más temía era que uno de mis vecinos había dejado uno de sus vehículos al final del solar y solo era cuestión de tiempo para que las llamas llegaran hacia el carro para hacerlo explotar y convertirse en una tragedia. De inmediato llamé al cuartel de bomberos. Al principio pasé por varios filtros para que ellos pudieran corroborar que lo que les decía era cierto. A los cinco minutos escuché las sirenas y ví a estos héroes anónimos entrar en acción y apagar el fuego. Mientras realizaban su labor pensé en el trabajo que hacen y todos los riesgos que toman. Sentí admiración y orgullo por ellos, pero a la vez sentí lástima y decepción por la situación en la que los tiene el gobierno,
¿Cómo es posible que tengan cuatro meses de salario atrasado estos grandes héroes que exponen su vida a diario para salvar vidas de personas que no conocen?
La verdad es una injusticia lo que se le está haciendo al Benemérito Cuerpo de Bomberos de Honduras.
Desde la cabina de mando, totalmente agradecido con los Heroícos Bomberos Catrachos.
Saludos.
Hugo